8 septiembre 2025 · hace 19 h

El destino final de los restos de Carlo Acutis: reliquias en disputa y el impactante destino de su corazón

· Fuente: haceminutos.com
El destino final de los restos de Carlo Acutis: reliquias en disputa y el impactante destino de su corazón
Tras la reciente canonización de Carlo Acutis, el primer santo millennial, el interés global por sus restos y objetos personales se ha multiplicado. La demanda de reliquias y la devoción por su figura ha rebasado templos y fronteras, generando debates sobre su conservación y un notable interés por el destino de su cuerpo y, en particular, de su corazón.

La gestión de las reliquias y el desafío de la Iglesia
La canonización de un santo da inicio a la veneración de sus reliquias, que pueden ser de primer grado (partes del cuerpo), segundo grado (objetos personales) o tercer grado (elementos que tocaron al santo). Con Carlo Acutis, la Iglesia se enfrenta a un nuevo desafío: la alta demanda de reliquias y la difusión del tema en internet y las redes sociales.

La Iglesia busca gestionar la distribución de estas reliquias para que sean veneradas en parroquias y diócesis de todo el mundo. Sin embargo, también debe controlar que este proceso se realice de manera adecuada y evitar que el interés por las reliquias se convierta en un fenómeno comercial o de culto superficial.

El impactante destino de su corazón
El destino de una parte específica de su cuerpo, su corazón, ha sido un tema de particular interés. El corazón, considerado simbólicamente como la sede de su gran amor por la Eucaristía, fue separado de su cuerpo y designado como una reliquia principal.

El corazón de Acutis se exhibe en una urna de cristal en un lugar de honor, a la vista de los fieles. Este destino, considerado “impactante” por muchos, tiene un profundo significado teológico: busca centrar la devoción de los fieles en el legado espiritual de Carlo Acutis, cuya vida fue un reflejo de su devoción por la Eucaristía.

El cuerpo de Carlo Acutis continuará siendo venerado en el Santuario del Despojo en Asís, donde fue enterrado. No obstante, el corazón, como una reliquia separada, se convierte en un faro de la fe para los peregrinos de todo el mundo.